La vida sin amor

Sigo sin entender como es posible amarte tanto. Sigo sin comprender porque el aire no se siente igual. La vida sin ti parece una falsedad, nada se siente bien, nada se siente correcto. Cada vez que te recuerdo, me doy cuenta, que vivo pretendiendo. Que no hay cabida en este mundo para mí si tu no estás. El cielo se da cuenta que mi rumbo ha desaparecido, que mi camino eras tu, eras mi guía y ahora que no estás, estoy perdido en un mar de recuerdos y de amarga soledad. Quiero olvidar que algún día, Me hiciste feliz, Pero es inútil fingir, No puedo, no puedo, No puedo vivir sin ti. Mis días de felicidad, murieron cuando te fuiste. Parece increíble que solo tú pudieras brindarle paz y alegria a mi corazón. Me lastima recordar a cada segundo la felicidad que me diste, me deja sin respiración saber que ya nunca me sentiré así. Quiero olvidarlo, drenarlo ¿pero cómo olvidar algo que no quiere ser olvidado? Que está atascado en tu presente, por el vivo recuerdo del pasado. Esta noche estoy envuelto en un mar de recuerdos, de experiencias vividas que aún siento en mi ser, ésta noche te siento conmigo, porque tu voz se confunde con las olas del mar y tu sonrisa con el brillo de las estrellas. No me dejes dulce recuerdo, puedes ser lastimero, pero es todo lo que me queda de ti, junto con el amor que aún te profeso y que nunca acabará. La vida después de ti, Es un castigo sin fin, Y no sobreviviré, Mi cuerpo, sin tu cuerpo, Antes y después de ti. Estar aquí, lejos de ti, no parece real, y no debería ser así. Luché por ti, sobreviví por ti, existo únicamente para tenerte aquí, conmigo, sintiendo tus caricias y tu piel de porcelana día y noche, sin pensar en el mundo, sólo en amarnos sin prohibiciones, sin miedos... Pero si tú no estás ¿para qué he de vivir? Si mi fuente de consuelo y felicidad se ha ido, que voy a hacer en el mundo, más que llorarte y extrañarte. Es prácticamente pecado que te hayas ido, y mi cuerpo no logra mantenerse con tu ausencia, pues necesita apoyarse en ti, en tu amor y en tu infinita dulzura. Después de ti la vida no es vida, después de ti, no hay alegría, después de ti, todo se vuelve amargo, se me nubla la vista, ya no quiero existir. Nada, es igual, para mí, Me obligo a vivir en duelo, Y no sobreviviré, Mi recuerdo sin tu recuerdo, Así es la vida, La vida después de ti. Camino por la ciudad, viendo la vida pasar, camino sin destino, sintiendo que el mundo no gira, observo a mí alrededor y ya nada se ve igual, vivo en un mundo surrealista desde que te fuiste. Las calles vacías expresan mi dolor, lúgubres, solas, frías, carentes de vida... Mi corazón se despierta cada día en duelo, una negrura que lo embarga, mi rostro no tiene expresión, mis ojos ven sin mirar, mis manos tocan pero no sienten en realidad. ¡Todo a mí alrededor se ha vuelto espejismo! ¡Ya nada tiene valor o sentido! Diré, que esto no está matándome, Pero eso no es cierto, Me he vuelto, un fantasma eterno, Que habita, en tu recuerdo. Cada día me preguntan si estoy mejor, si he logrado avanzar un poco, y yo, cada día, les vuelvo a mentir, diciendo que estoy mejor y que no se preocupen por mí. ¡Merlín sabe que tan grande es esa mentira! Que me muero por ti, que no soporto que no estés aquí. Pero son mis amigos, me quieren lo sé, y ellos también sufren, por eso miento, porque ellos pueden rehacer su vida estando juntos, en cambio para mi ya no hay mas mundo... Me he convertido en algo menos que un ser vivo, si escuhas bien, oirás sólo el eco de mis latidos como único rastro de que estoy vivo, latidos que no hacen nada mas que amarte y prolongar mi sufrimiento... ¡Que cruel destino! ¡La vida jugando su cruel papel! Todo lo que me queda es una soledad que oscurece mis pupilas, una amargura que interrumpe mis sueños y una fría lágrima que hiela mi rostro... Tan solo vivo de tu recuerdo, me alimento de lo que me queda de ti... Y así, lo que un día fue ya no es, Maldita mi suerte de sólo En sueños verte, De amarte, De amarte y de perderte.